La OCDE ha reducido su previsión de crecimiento económico para México en 2024, proyectando solo un 1.4%, debido a la desaceleración de la demanda interna y del mercado laboral. A nivel global, el organismo ve señales de mejora, aunque persisten riesgos que podrían afectar la estabilidad económica mundial.
Desaceleración en la Economía Mexicana
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha ajustado a la baja sus expectativas de crecimiento para México. En mayo de 2023, la proyección era de un 2.2% para 2024, pero ahora se espera que solo alcance el 1.4%. Para 2025, la estimación también ha disminuido, de un 2% a un 1.2%. Según el informe «Perspectivas Económicas de la OCDE», la desaceleración de la demanda interna es uno de los principales factores detrás de esta reducción.
Impacto en el Mercado Laboral
Además de la demanda interna, la OCDE advierte que el mercado laboral en México se está relajando, reflejo de una disminución en la creación de empleos. Esta tendencia no solo afecta a México, sino también a otros países como Japón, Corea, Turquía, Sudáfrica y Estados Unidos.
Perspectivas para Estados Unidos
En cuanto a Estados Unidos, principal socio comercial de México, la OCDE mantuvo su previsión de crecimiento en 2.6% para 2024, aunque para 2025 ajustó su proyección de 1.8% a 1.6%. Se espera que la economía estadounidense desacelere su crecimiento tras un periodo rápido, aunque esto podría verse contrarrestado por la flexibilización de la política monetaria.
Situación Global: Inflación a la Baja y Crecimiento Estable
Panorama Internacional
A nivel mundial, la OCDE observa que el crecimiento económico sigue siendo sólido en países del G20 como Estados Unidos, Brasil, India, Indonesia y el Reino Unido. Sin embargo, algunas economías como Alemania y Argentina presentan debilidades, siendo esta última afectada por una contracción en su producción.
Proyecciones para 2024 y 2025
El Secretario General de la OCDE, Mathias Cormann, destacó que la economía global está mostrando signos de mejoría, con una inflación en descenso. Para 2024 y 2025, se proyecta un crecimiento global del 3.2%, impulsado por el comercio y la moderación de los precios.
Políticas Monetarias y Reformas Estructurales
La OCDE subraya que la caída de la inflación brinda espacio para flexibilizar las tasas de interés, aunque recomienda cautela en la política monetaria hasta que la inflación se estabilice en los objetivos de los bancos centrales. Asimismo, enfatiza la necesidad de acelerar las reformas estructurales para mejorar las perspectivas de crecimiento a mediano plazo, incluyendo la reducción de barreras regulatorias en sectores clave.
Riesgos y Oportunidades para la Economía Mundial
Desafíos y Amenazas
La OCDE identifica varios riesgos que podrían afectar la economía global. Una política monetaria demasiado restrictiva podría impactar negativamente en la demanda, mientras que una desviación en la trayectoria de la desinflación podría generar inestabilidad en los mercados financieros. Las tensiones geopolíticas, como la guerra en Ucrania y los conflictos en Oriente Medio, también representan un peligro para el crecimiento y la inflación.
Posibles Oportunidades
Por otro lado, la OCDE también ve aspectos positivos: el aumento en los salarios reales podría mejorar la confianza del consumidor y dinamizar el gasto, mientras que una disminución en los precios del petróleo podría acelerar la desinflación global.
Llamado a la Prudencia Fiscal
Cormann subrayó la importancia de reconstruir el margen fiscal, especialmente en un contexto de altas deudas públicas. Esto permitiría a los gobiernos responder a futuros desafíos, como los relacionados con el envejecimiento de la población y las inversiones necesarias en la transformación digital y la transición hacia una economía más sostenible.