Entre enero y agosto de este año, el costo financiero de la deuda pública en México ha alcanzado cifras alarmantes, superando los 90 mil millones de pesos mensuales. De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el costo total durante este periodo fue de 722,746 millones de pesos, lo que representa un incremento del 4.0% en comparación con el año anterior. Este es el nivel más alto registrado desde 1990.
Reducción de Gastos Programados
A pesar de este aumento en el costo financiero, el gobierno gastó 46,067 millones de pesos menos de lo previsto en su presupuesto. Según la SHCP, esta situación se debe a la tendencia de la Secretaría a sobreestimar el costo financiero de la deuda, lo que ha llevado a desembolsar menos de lo calculado inicialmente. Jorge Cano, investigador de México Evalúa, explicó que este comportamiento se ha vuelto común en los últimos años.
Detalles del Costo de la Deuda
El costo financiero total a finales de agosto fue de 722,700 millones de pesos, lo que refleja un aumento real del 9.3% en los pagos de intereses en moneda nacional. Aunque los costos en moneda extranjera disminuyeron un 9% en comparación con el año anterior, el pago en moneda interna alcanzó los 541,127 millones de pesos.
Presiones sobre las Finanzas Públicas
El costo financiero de la deuda se ha convertido en una de las principales cargas para las finanzas públicas, consumiendo una parte considerable del presupuesto. Las tasas de interés elevadas, resultado de la inflación global y las decisiones del Banco de México (Banxico), han incrementado aún más este servicio. A pesar de que las tasas han empezado a bajar, continúan siendo altas.
Proyecciones para el Futuro
Para el próximo año, la SHCP estima que el costo financiero será de 1 billón 230,256 millones de pesos, lo que representa un descenso del 6.3% respecto a lo aprobado para este año, debido a menores tasas de interés. Sin embargo, se anticipa que el costo financiero representará el 14.2% del presupuesto, un ligero aumento comparado con el 14% de este año.
El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) advierte que, aunque se espera una reducción en la presión financiera, esto no será suficiente para reducir el déficit del 5.9% al 3.0% del PIB.
Ahorros y el Fondo de Estabilización
A partir de este año, los “ahorros” generados por la reducción del costo financiero se destinarán al Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP), un fondo que el gobierno puede utilizar en caso de emergencias económicas. Hasta junio de este año, el FEIP contaba con 49,304 millones de pesos, un aumento del 23% respecto al año anterior, aunque sigue siendo un 87% menos que los recursos disponibles en el primer semestre de 2019.
El CIEP ha indicado que, bajo las condiciones actuales, tomaría aproximadamente 17 años para que el FEIP alcance los niveles de 2018, lo que pone de manifiesto la vulnerabilidad de las finanzas públicas ante posibles crisis económica.