América Latina está emergiendo como un actor clave en la transición hacia energías más limpias. Según el informe “Rumbo a la energía verde: oportunidades y retos en la transición energética”, elaborado por Broadminded, el centro de investigación de Sherlock Communications, Chile, México y Brasil lideran los esfuerzos para incrementar la capacidad de energía renovable en la región.
Brasil, líder absoluto en la región
Brasil se consolida como el país más destacado en este proceso, aportando el 58% de la nueva capacidad de energía renovable prevista para América Latina en 2030. Este liderazgo se basa en la combinación de recursos naturales abundantes y políticas que promueven la inversión en tecnologías limpias.
México: grandes expectativas y oportunidades
México, por su parte, se posiciona como el tercer mayor contribuyente a esta capacidad renovable, representando el 10% del total regional proyectado para 2030. Aunque el país cuenta con un notable potencial gracias a su riqueza en recursos solares y eólicos, actualmente estos representan solo el 12% de su matriz energética, una cifra inferior al promedio global.
Este bajo porcentaje destaca una oportunidad significativa para el crecimiento en este sector, que ya está atrayendo la atención de inversores nacionales e internacionales. Además, la reciente elección de Claudia Sheinbaum como presidenta genera optimismo. Su experiencia técnica y su compromiso con la sostenibilidad incluyen planes para ampliar proyectos de energía solar y eólica, así como modernizar plantas hidroeléctricas.
Chile: un jugador clave en el cambio energético
Chile, junto con Brasil y México, es otro pilar en la transición energética regional. Aunque el informe no detalla cifras específicas sobre su participación, su protagonismo refleja un esfuerzo continuo por consolidar una matriz energética más limpia y sostenible.
Una región con una de las redes eléctricas más limpias del mundo
El informe destaca que el 60% de la electricidad en América Latina ya proviene de fuentes renovables, posicionando a la región como una de las más avanzadas en términos de sostenibilidad energética a nivel global. Esto subraya el potencial de América Latina para liderar la transición energética a nivel mundial, apoyándose en tecnologías solares, eólicas e hidroeléctricas.
Desafíos y perspectivas
Aunque el camino hacia una matriz energética más limpia avanza con fuerza, persisten retos como la necesidad de mayores inversiones, la integración de energías renovables en las redes existentes y la implementación de políticas más ambiciosas. No obstante, el interés de actores internacionales y las metas planteadas por líderes como Claudia Sheinbaum podrían acelerar este cambio y posicionar a la región como un modelo de transición energética sostenible.
Con estos avances, América Latina se perfila como una potencia en el uso de energías renovables, marcando un paso firme hacia un futuro más verde y sostenible.