El Banco de México (Banxico) ha publicado su informe sobre las economías regionales correspondientes al segundo trimestre de 2024, y el panorama no es alentador. Durante este periodo, se observó una notable debilidad en la actividad económica en todas las regiones del país.
Atonía Generalizada en el Segundo Trimestre
Banxico ha señalado que la actividad económica se ha mantenido débil en todas las regiones durante el segundo trimestre del año. La expansión esperada para los próximos meses será moderada, y el desempeño económico podría ser menos favorable de lo anticipado debido a un entorno complejo e incierto.
Actividad Económica Regional
Entre las regiones del país, el sur destaca por mantener niveles de actividad económica más altos que los anteriores a la pandemia de COVID-19. En contraste, las manufacturas experimentaron una contracción en el norte y centro-norte, mientras que en el centro y sur se observaron ciertas expansiones. Sin embargo, todos estos niveles están por debajo de los registrados en el mismo periodo del año anterior.
Desempeño en Construcción y Comercio
En cuanto a la construcción, se notó una desaceleración en el norte y sur del país debido a la disminución de la inversión pública tras el cambio de Gobierno. No obstante, el sector privado en estas regiones creció, y las regiones centrales vieron una expansión tanto en la obra pública como privada.
La actividad comercial se estancó en el norte y centro, mientras que en el centro-norte y sur se observó cierta reactivación. En el ámbito agropecuario, el norte y sur experimentaron crecimiento, mientras que las regiones centrales enfrentaron caídas.
Factores de Riesgo y Oportunidades
Banxico ha identificado varios factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico, incluyendo la inflación, problemas de gobernanza y condiciones externas adversas. También se mencionan el deterioro de la seguridad pública y la posibilidad de fenómenos climáticos adversos como riesgos importantes para el desempeño económico.
Por otro lado, un mayor gasto público en infraestructura y condiciones más favorables para la inversión privada podrían ser catalizadores positivos para la actividad económica regional.
El panorama económico para México sigue siendo incierto, con desafíos significativos que podrían afectar el crecimiento en los próximos meses.